Una de las mayores pesadillas de seguridad para Microsoft, reconocida por ellos en repetidas ocasiones, son las versiones desactualizadas de Internet Explorer. La simple presencia (muy amplia) de Internet Explorer 6 en el ecosistema Windows es responsable de una gran parte de los problemas de seguridad a los que deben hacer frente los usuarios de este sistema operativo cuando navegan por Internet.
En un post del blog oficial de Microsoft para Internet Explorer la compañía ha anunciado que a partir de ahoralas actualizaciones del navegador serán automáticas para los usuarios de Windows. Esta actualización se realizará a través de Windows Update, por lo que podremos configurar (al igual que con otras actualizaciones) si queremos que los cambios se hagan de forma automática, que se nos pida confirmación o simplemente que no se realicen.
Los Internet Explorer pasarán a la siguiente versión (si la hubiera) de forma automática. El proceso comenzará en enero para los usuarios de Windows de Australia y de Brasil. Con esta iniciativa Microsoft reacciona ante la lenta actualización que se produce en usuarios pero sobre todo en empresas, que aún se mantienen en versiones antiguas muchas veces por la vieja táctica de lo "malo conocido". Solo que en esta ocasión lo malo conocido es rematadamente malo.
Uno de los grandes coladeros en Internet es actualmente la ingeniería social y solamente las últimas versiones de Internet Explorer ofrecen alguna protección eficaz. Según el informe Security Intelligence Reportde Microsoft es una de las grandes amenazas actuales.
Tal y como apuntan en Microsoft las actualizaciones automáticas también serán buenas para los desarrolladores, que podrán dejar de tener en cuenta las peculiaridades de las versiones más antiguas de los navegadores a la hora de diseñar páginas o desarrollar aplicaciones web. Para aquellos que por alguna razón quieran impedir estas actualizaciones, además de con Windows Update, Microsoft proporcionabloqueadores de la actualización para Explorer 8 y Explorer 9.